Cita Triple en Us~

"..C-cómo es que no les da miedo?!" Preguntó totalmente asustado mientras veía la pelicula. El suspenso era demasiado. Sabía que pronto vendría la peor parte y se asustaría a muerte.

Oyó las palabras de Pedro sobre sus pastillas y asintió rapidamente.
"Ve a tomarlas para que te recuperes, pero cuidado con los fantasmas..." dijo sin pensar aun viendo la pantalla ansiosamente. Casi podría gritar de pura ansiedad sin que hubiese pasado nada. Pedro se fue a la cocina.

Hasta que la música indicó el momento y pasó aquella parte de terror repentina cliché Alfred pegó un grito y se pegó como lapa a Kiku.

"AAAAAAAGHHHH Es horribleee! Ya-Ya-Ya pasó?!"

Películas que conocía como la palma de su mano.
El típico final cliché que hacía a los cobardes pegar un gritito. El japonés arqueó una ceja al ver que tenía peor que chicle en suela de zapato al americano.

"Si, ya paso. Ahora está ocurriendo lo típico: la chica es descuartizada, sus órganos vuelan por montones y al final sale el "mounstruo" en toda la pantalla a fin de asustar al espectador, Alfred-san." Palmeó la espalda del rubio un par de veces para que se calmase. "Se supone que usted es un heroe y ... ¿Se asusta por cosas como esas?"

"N-No tiene nada que ver con el heroísmo. Cualquiera se asustaría con eso Kiku, como puedes decirlo de forma tan serena?" miró la pantalla un momento y se pegó a Kiku de nuevo evitando mirar, era una gran interrogante por que insistía tanto en ver películas de terror cuando al final ni terminaba mirándolas sumido en su miedo irracional.

"D-Definitivamente eres muy valiente Kiku..." Concluyó abrazando al asiático mirando la pantalla viendo que la peor parte ya había pasado.

"Dios no voy a poder dormir después de esto..." dijo con tono asustado. "Te quedarás a dormir conmigo Kiku?" preguntó sin ninguna mala intención.

No estaba acostumbrado a los abrazos, por lo que algo incómodo se sentía mientras era estrujado por el americano aunque no se notase.
Kiku suspiró y volvió a palmear la espalda del rubio con la intención de que si al menos le estaba abrazando, que fuese de una manera un poco más sútil, ya que estaba quedándose falto de aire.

"¿Valiente?, Creo que exagera, una película como esas no da miedo." Argumentó. "Uno siempre sabe el final y con el tiempo no te causan nada como me ocurre a mí." Agregó.

El pelinegro miró hacia la pantalla en la que comenzaban a salir los créditos y luego a Alfred, pensaba que entendería que por mucho que el oriental quisiera irse, tampoco lo podría hacer por la hora que eran.

"No me molesta quedarme,los vuelos no salen tan tarde y no vine hasta aquí para ver una simple película." Era obvio, nadie viajaba de Japón a USA para una tarde de cine. "Pero... ¿Quedarme a dormir con usted?, ¿Tanto miedo le dio la película?"

Llego unos minutos después, el ruido de la salida de la película sonaba por aquel lugar, Pedro prendió la luz de lugar, sonriendo casi con burla al ver al rubio pegado como lapa al japonés.

—Prepare un poco de algo caliente –dijo.

Coloco sobre la mesa, uno a uno tres tazas de bebida.

—Té para Kiku –le informo al tiempo de señalarle la taza-, Café para Alfred, y chocolate para mí… ¿De que me perdí? –pregunto entre curioso-

Pedro se dejo caer al lado contrario de donde se encontraba el japonés, cruzando su pierna con cierta elegancia, se llevo la taza a la boca, y tomo un sorbo.

—En verdad… Tú casa es grande, Alfred… -dijo de repente-, tengo una duda… ¿Dónde dormiré yo? –Pregunto curioso-, Oh, por cierto… Tome tu sueter… -soltó mientras señalaba la prenda que llevaba puesta-, tenia un poco de frio, la cocina no tiene buena calefacción –explico, con cierta penuria en su rostro-

"Gracias por el café Pedro!" dijo animadamente despegándose de Kiku para tomar la taza de café, pero aun quedándose cercano al japonés, aun no lograba quitársele el miedo y dudaba que este se le pasase.

"Bueno hay variadas habitaciones... asi que pueden dormir en las que quieran aunque no me hagan dormir solo, va a salir algo de abajo de mi cama y..." Comenzó a hablar cosas sin sentido hasta oir lo del sweter. "No hay problema, asi no te resfrías más. Tienes que cuidarte, las enfermedades son cosas contra las que los héroes no podemos hacer nada..."

"Arigato." Mencionó tomando la taza tibia de té entre las manos, la verdad es que no estaba mal para entrar en calor beber algo caliente, al menos el frío pedía a gritos una taza de té.

"Comprendo, en ese caso prefiero tomar medidas necesarias y para evitar que Alfred-san tenga miedo a la hora de dormir, propongo que Pedro-san y yo le acompañemos." Respondió dando un sorbo de su té con naturalidad.

No podía ser tan malo, cuando era pequeño dormía junto a todos sus "hermanos" en una misma habitación. ¿Qué cambiaría las cosas con amigos?.

Pedro no pudo contener más la risa, ante aquellas palabras confortables que le daba el americano. Les miro un segundo a ambos, descubriendo sin saber que Kiku se veía extrañamente “adorable”, les sonrió a ambos…

—Si~ -exclamo emocionado, quemándose la boca en el proceso- ¡AH! Me queme… -dijo con la lengua levente hinchado-. Me parece bien… Los tres juntos… ¡Esperen! ¿En la misma cama? –pregunto-, yo… yo pateo –dijo, con unos visibles lagrimones-.

Escucha las palabras de Kiku emocionado.
"Gracias Kiku! Eres tan bueno, juro que no sentiré miedo de ese modo, si no, no podría dormir..." suspiró aliviado, escuchando el resto de la problemática.

"Bueno no se si quepamos los tres en una sola cama... "pensó un momento. "Pero podemos dormir en distintas camas en una pieza o algo asi... " dijo. "Aunque no tengo camas en el suelo como en tu casa Kiku, lo siento" SE quedó en silencio un momento antes de levantarse otra vez.

"Bueno, otra película de terror...?"

"Descuide, que un día duerma en cama americana no significará el fin del mundo." Sonrió al paso que dejaba su taza de te sobre la mesa frente al sillón.
Se sorprendió por lo masoquista que era Alfred al querer ver una película de terror que era lo que tanto le espantaba, aunque no menciono nada.

"Si el resto quiere, entonces ponga otra. Pero si le da algo de miedo ponga una película de cualquier otra cosa."

El mexicano solo asintió con la cabeza a todo lo que decía el americano… Le miro curioso cuando explico lo de las camas. Sin saber, hizo un mohín de disgusto, al comprender que ese día no compartiría la sabanas con él, ya que de alguna forma, siempre que iba a verlo o Alfred venia a su casa, dormían en la misma cama, ¿Por qué debían cambiar las cosas?, pensó alterado.

Volvió a tomar otro trago a su taza, mientras veía entretenido como empezaban los típicos comerciales que anunciaban otras películas. Suspiro derrotado, al saber que las películas de Alfred no cambiaran, ¡así pasaran mil años!

Se acurruco así mismo, esperando que Alfred volviera a su lugar.

—Tengo frío… -dejo escapar.

Puso otra película de terror, esta no podía ser tan horrorosa como la anterior... y sería la última. Debía superar su miedo... además estaban los otros dos, nada iba a atacarlo si estaban todos..
¿Pero que pasaba si algo los atacaba a todos? ¡Como en las películas de zombies!

Volvió a sentarse entre sus dos invitados esta vez con popcorn. Estaba comiendo popcorn cuando escuchó al mexicano.

"Oh tengo una idea, hay que hacer calor humano como los pingüinos!" Dicho esto abrazó al mexicano esperando que asi se le quitase el frío. "Y Tu Kiku? No tienes frío?"

Se restregó uno de sus ojos de forma cansada, dejo su taza semi vacía en la mesa, se sorprendió un poco cuando el americano le abrazo. Él no evito sonrojarse al sentir como era enredado. Trato de no reírse ante su comentario de los pingüinos…

Tarde, Pedro se aferro a Alfred, ahogando su risilla infantil.

—Alfred, me sorprende tu forma tan… -guardo silencio-, original de tus argumentos…

El japonés volvió a sorber la taza de té, jugando vagamente con ella entre las manos.
Mirando curioso al mexicano siendo abrazado por el mexicano, menuda forma de dar calor. Suponía a que Alfred colocaría un poco más alta la calefacción ya , pero no algo tan... infantil.

"Sí, está un poco helado o es que yo no me acostumbro a los cambios climáticos." Contestó "Aunque creo tener menos frío que Pedro."

Escucho atentamente cada palabra que decía el japonés, se volteo con una sonrisa en el rostro. Dejo escapar un suspira cansado.

—Si, debe ser que mi cuerpo no ha estado del todo bien, la gripa que he tenido, aunque la he podido controlar, aun… siento que no estoy del todo bien… -se recostó en el hombro de Alfred, y guardo silencio, mirando al televisor, entretenido…

Al parecer… La película estaría un poco interesante, él no evitar, sin saber… tomarle la mano al rubio, ante las música que servía para amenizar la trama…

"Mmm..." Sigue aferrado al mexicano despues de haber sentido que toma su mano. "Ya pasará si te cuidas adecuadamente..."
Miró a Kiku tras sus palabras y luego miró la pantalla con cara de miedo. "Pero es que me da miedo ir a subirle a la calefaccion, que pasa si algo me ataca en el camino?" soltó un brazo del abrazo con el latinoamericano y lo extendió hacia el japonés.

"No quieres hacer calor humano en masa, Kiku? Aunque si te incomoda demasiado siempre puedes ir a subirle a la calefacción, yo no me atrevo..."

"Que yo sepa la calefacción está a mitad del pasi..." El japonés no terminó de hablar cuando sintió la otra mano del americano rodearle tal y como lo había hecho con el mexicano.
Kiku parpadeó un par de veces extrañado mientras miradaba la pantalla y después encaró al americano.

"No me incomoda, pero creo que para Alfred-san si lo es." Agarró con las manos uno de los bento en el que sacó con los palillos un pedazo de carne. "Al menos para poder comer algo." Le acercó el bocado sereno, pensando en que la película comenzaría igual de lenta que la mayoría de terror.

Se acomodo un poco sus cabellos, entretenido por las escenas de aquella joven caminando por el pasillo, el sonido de suspenso inundo la habitación. Pedro no evito apretar un poco la manos, ante le hecho de que la protagonista, empezaba a transpirar con fuerza al casi abrir la habitación que según contaban en la historia, siempre se escuchaba a alguien llorando.

Pedro abrió los ojos desmesuradamente… Al ver como aquella fantasmagórica aparición se empezaba a formar. La chica de la tele, empezó a temblar, al igual que él… Y, justo cuando… por fin se iba a dentar… Un sonido de canción timbro.

—AH~ -grito con espanto-, ¿Qué demonio… -logro articular-. Creo que es mi celular…

Saco el aparato de su bolsa del pantalón. Lo abrió, logrando callar el sonido que hacia… Solo una enorme sonrisa inundo su rostro.

—Lo siento… -dijo como escusa, sonrojado-

Aceptó la comida que le dio el japonés con una amplia sonrisa.

"Gracias! Eres tan servicial, Kiku!" Dijo, o intentó decir, pues no se le podia entender mucho lo que en verdad estaba diciendo debido a la comida.

Luego miró la pantalla, la escena era justo la de suspenso y Alfred comenzaba a sentir la ansiedad del miedo dominar mientras mascaba, en ese momento el celular de Pedro sono y Alfred pegó un salto y tragó. Con lo que se atragantó. Empezó a toser mientras Pedro se disculpaba con un sonrojo. Lo que no noto pues estaba demasiado ocupado intentanto regular su respiración para que el aire pasase a sus pulmones de una vez.

Levantó la mirada y vió a los dos occidentales haciendo cualquier cosa menos prestando atención a la película.
Dió un pequeño suspiro y agarro el control del DVD colocando la película en pausa -justo en una escena salvaje- para luego levantarse del sillón y ayudar al americano a desatorarse con el pedazo de comida.

"Respire tranquilo Alfred-san, ¿Pedro-kun puedes traer un vaso de agua?" Pidió aun sin saber si es que el mexicano le estaba escuchando. Kiku le dió unas cuantas palmadas algo más fuertes en la espalda al rubio para ver si mejoraba y no se ponía azul por la falta de aire.

—Ah, si, si… -respondió ante el pedido de Kiku.

Pedro corrió hacia la cocina, dejando a los dos chicos en la sala por unos instantes, pensado seriamente que si Alfred moría seria por culpa del susto. Sirvo el baso con agua, y regreso…

—Aquí tienes –dijo al ofrecerle el agua al americano.

Siguió mirando preocupado, al ver como Kiku seguía dándole pequeñas palmaditas para que bajase el trozo de carne. Suspiro un poco, al ver como Alfred tomaba el agua…

—No… No será mejor ver otra cosa… digo, porque Alfred no tiene muchos nervios para esta clase de emociones… -dejo escapar el moreno-, Oh, por cierto… ¿Puedo usar tu teléfono? –pregunto, curioso y algo emocionado.

Por fin su respiración se normalizó tras tomar el agua que le habia traído el mexicano y con la ayuda del japonés. Suspiró.

"Gracias..." puso cara de tristeza "No! puedo resistirlo! Terminemos de verla, no estoy asustado!" protestó mintiendo . " Y claro que puedes usarlo, adelante" Sonrió, acercandose para quitarle el control a Kiku. "Quieres que deje la pelicula en pausa mientras hablas o le doy play de todos modos?" preguntó a Pedro.

Pedro le miro escrupulosamente, al saber perfectamente que mentia. Le pico su mejilla con su dedo.

-Si, claro Alfred... No puedes ni soportar los trailler... -suspiro-... En fin, no le pongas stop.. No, no quiero que escuchen lo que hablo -confeso, sonrojado-... EH, por cierto... No.. no importa que sea un poco lejos donde voy a llamar -el moreno se sonrojo aun mucho más. Rió nervioso-. Prometo pagarte luego... -le guiño el ojo con ademán confidencial.

Sonrió sin recordar que aun su economía no se estabilizaba por completo de la crisis.

"No te preocupes. Habla tranquilo." Esperó a que el latinoamericano se dirigiese al teléfono antes de pegarse a Kiku y ponerle play a la pelicula nuevamente. Que clase de llamada necesitaria hacer Pedro que fuese tan confidencial? esperaba que no anduviese metido en nada peligroso... concentró su atención en la pelicula nuevamente, al parecer la peor parte habia pasado, pero aun se sentía asustado.

El japonés solo miró al mexicano con curiosidad al ver que se incomodaba luego de haber contestado el celular.
"Vaya tranquilo Pedro-kun, dudo que nos movamos de aquí." Respondió con una pequeña sonrisa acomodando el cuello al sillón nuevamente.

Sintió a Alfred apegársele, posiblemente por el frío o por tener donde cubrirse si es que había alguna escena que le espantase.
Se quedó viendo el resto de la película en silencio, estirando de vez en cuando el brazo para tomar un poco de té, como era de esperarse en ninguna ocasión había alguna escena que le hiciera temblar.

"Que descuartizara al sujeto era demasiado obvio, ¿No cree eso Alfred-san?" Preguntó mientras miraba a la pantalla otra escena "violenta" de la película.